Cada vez son más familias a las que les encanta la idea de contratar la fotografía desde un lado más personal.
En este caso Yolanda y Álvaro no lo dudaron, querían retratar para siempre las primeras horas tras el nacimiento de su pequeña.
En un ratito después de su llamada estaba en el hospital conociendo a Isabella. Con unos padres tan emocionados y felices que las fotos hablan por sí solas.
Una fotografía real, dinámica, espontánea, sencilla y lo que más me gusta, ¡NATURAL y llena de sentimientos!
Gracias por compartir conmigo este momento tan bonito y tan íntimo.
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